Ioana Grigoropol y George-Bogdan Ivanov

«Cansados de largos viajes diarios a la oficina, vendimos todo y nos fuimos a vivir la vida nómada»

Ioana Grigoropol y George-Bogdan Ivanov son un pareja de ingenieros de Rumanía. Durante un tiempo, por trabajo, se establecieron en Reino Unido, pero se hartaron del tráfico y la rigidez de los horarios de oficina. Así que vendieron todo y se lanzaron a la vida nómada. Visitaron Japón, Irlanda, Noruega, España, Portugal, Francia, Marruecos, República Checa, Islandia, Grecia, Malta, Italia o EE.UU. Hasta llegar a Gran Canaria, atraídos por las experiencias que otros nómadas contaban en foros de trabajo remoto. Han sido tan felices aquí que es donde quieren criar a su hija Otilia.

 

¿Quiénes son Ioana y George y en qué momento llegan a Gran Canaria?

Somos una pareja que se conoció en la Universidad de Bucarest. Hemos estado juntos durante casi nueve años desde entonces. En un momento, hace varios años, nos mudamos al Reino Unido, donde trabajábamos en horario de 9 a 5 para grandes empresas. Cansados de la vida en una ciudad tan grande, vendimos todo y nos fuimos con solo una mochila a vivir la vida nómada, planeando visitar España por unos meses y luego irnos a Asia.

Después de un mes de mochileros en la España continental, volamos a Gran Canaria porque escuchamos que es un lugar de moda para esta comunidad de teletrabajadores. Volvimos a Rumanía durante unos meses por motivos familiares y nos dimos cuenta de que todavía no habíamos terminado de explorar Gran Canaria, así que volvimos y no nos hemos ido desde entonces.

 

¿Cuál fue su primera impresión al llegar?

Anteriormente ya habíamos pasado un año nuevo en Fuerteventura, sabíamos un poco qué podíamos esperar. Pero hemos descubierto que Gran Canaria, además de lo que Fuerteventura tiene para ofrecer, también cuenta con grandes espacios de trabajo y con una comunidad centrada en el trabajo remoto. CoWorkingC fue nuestro primer coworking y es el lugar donde tuvimos contacto por primera vez con la comunidad de aquí, donde hicimos nuestros primeros amigos nómadas.

La imagen que se obtiene de Las Palmas de Gran Canaria, a partir de los recursos en línea de nómadas, la imagen de una ciudad bulliciosa repleta de teletrabajadores, es bastante diferente a la que hemos encontrado aquí: es una ciudad con gente cariñosa y relajada, donde todos parecen conocerse. Para ser honesto, eso fue lo que hizo “click” en nosotros y por lo que decidimos quedarnos.

 
 

¿Cómo ha sido vuestra vida en Gran Canaria en este tiempo?

Llevamos viviendo en Gran Canaria cuatro años. Trasladamos nuestros negocios aquí e hicimos de la isla nuestra casa. Disfrutamos de las playas y del buen clima durante todo el año. Los fines de semana, nos encanta salir con nuestro grupo de amigos, o tal vez ir a relajarnos a una casa cueva en las montañas.

Desde que nos hemos mudado aquí hemos seguido trabajando para avanzar en nuestras carreras. Pero al mismo tiempo, continuamos nuestros viajes, alguno de los más importantes fueron por ejemplo los 800 kilómetros del Camino de Santiago o un viaje por Japón por un mes, mientras trabajamos a tiempo completo.

Y lo más importante es que hicimos una persona, o una pequeña hija, Otilia.

 
 

¿Cuándo y por qué deciden cambiar su forma de vida y optar por el teletrabajo?

Llevamos experimentando con el trabajo a distancia desde hace bastante tiempo, incluso estando todavía en Rumanía. Inicialmente conseguimos muchos clientes, pero no lo gestionamos bien, teníamos poca experiencia con este estilo de vida, y fue entonces cuando volvimos a nuestros trabajos corporativos en Londres.

Finalmente, hemos aprendido a equilibrar el trabajo y la vida personal y nos hemos adaptado mejor a este estilo de vida. Nuestra principal motivación fue la libertad que obtienes y la capacidad de organizar tu día de la manera que mejor te funcione. No nos gustaba exprimir viajes en fines de semana prolongados o tener que tomarnos días libres para atender asuntos personales.

 

¿Cómo imaginan su vida ahora sin esta alternativa laboral?

Honestamente, no la podemos imaginar. Echaríamos de menos la flexibilidad y las oportunidades que ofrece este tipo de trabajo. Una vez que haces el cambio para trabajar por tu cuenta de forma remota, casi ninguna ventaja laboral te puede hacer volver a un empleo normal de 9 a 5 en una oficina.

 
 


 


 

 
 
 
¿Y cómo es vivir esta experiencia en pareja?

Tiene sus pros y sus contras. Las ventajas son que tienes un cómplice que va a tener las mismas libertades y horarios que tú. También un compañero de viaje permanente.

Los inconvenientes son que, probablemente, harás menos relaciones porque no estás muy motivado para construir nuevas amistades. También debes tener cuidado y tomarte tu tiempo libre, pasar el 100% del tiempo con la pareja puede ejercer una presión significativa en la relación.

Un aspecto clave de nuestra experiencia fue dividir un poco la vida personal y profesional, trabajando en diferentes proyectos y yendo a diferentes espacios de coworking, para poder interactuar con nómadas, expatriados y locales, y aún tener algo de qué hablar a la hora de la cena con nuestra pareja.

 

¿Qué aportan profesionales como ustedes a destinos como Canarias?

Uno de los beneficios es la diversificación del turismo que llega a Canarias. Además de las vacaciones operadas por tours que traen turistas al sur de la isla, Gran Canaria ahora también atrae a trabajadores remotos, que pasan más tiempo aquí, que viajan más despacio, que contribuyen más a la economía y a las comunidades.

Conocemos varios casos de personas que comenzaron como trabajadores remotos, se convirtieron en residentes permanentes y eventualmente se convirtieron en empresarios exitosos o crearon negocios que brindan oportunidades laborales fuera del turismo.

 

¿Cuáles son vuestros planes a partir de ahora?

Por el momento, estamos planeando criar a nuestro bebé aquí, como una verdadera “canaria”. Esperamos que vivir cerca de la playa en un ambiente relajado como Gran Canaria contribuya a que tenga una gran infancia. Seguimos trabajando en nuestros negocios y también estamos pensando en establecer una tienda de desarrollo local. Un poco más adelante, estamos planeando hacer ese viaje a Asia que nunca llegamos a hacer, ahora como una familia de tres. Pero aún así, Gran Canaria sería el lugar al que regresaríamos.

 

¿Qué le dirías a otro profesional que esté pensando en teletrabajar? ¿Y si quisiera hacerlo desde Canarias?

Diría que el trabajo a distancia te da mucha libertad y flexibilidad, pero no es para todos. Muchas personas tienen dificultades para lidiar con tan poca estructura y pueden sentirse abrumadas. Pero no te rindas fácilmente porque hay una curva de aprendizaje y, al final, podría valer la pena. Pruébalo. Y decide si el trabajo remoto es para ti o no.

Gran Canaria es un gran lugar para trabajar de forma remota. Por el buen equilibrio entre un lugar de vacaciones con excelentes playas, gran naturaleza y las diversas oficinas y comunidades.

Dicho esto, tuvimos que lidiar con bastantes obstáculos cuando decidimos convertirnos en residentes aquí. Abrir cuentas bancarias, conseguir un proveedor de Internet o un alquiler a largo plazo resultó bastante difícil. Logramos superar todas esas dificultades sobre todo porque Ioana sabe bien el español y porque yo tenía un NIE de mi Erasmus en Barcelona, que es clave para todo aquí.

Aconsejo a cualquiera que se mude aquí que se tome el tiempo para aprender español. Aunque debo decir que los obstáculos son cada vez más pequeños y también estamos mejorando para superarlos. Hazte amigos tanto de trabajadores remotos como de lugareños, y disfruta de la cultura relajada y la gran naturaleza que se encuentra aquí en Canarias.
 

El trabajo a distancia también tiene curva de aprendizaje

 
 

 
 

*Perfil en LinkedIn de Ioana Grigoropol y de George-Bogdan Ivanov

 

*Textos: Ana Sánchez.
**Fotografía: Leopoldo H. Santana

 

REPEOPLE.CO