Marco Moreno: ‘Con la tecnología logramos que la visita a La Fortaleza sea amena y divertida’

Marco Moreno dirige ‘Tibicena Patrimonio y Arqueología’, empresa de gestión, recuperación y puesta en valor de espacios patrimoniales. Licenciado en Historia por la ULPGC, Marco encontró en la arqueología su pasión y su camino profesional. Hoy gestiona el ‘Centro de Interpretación de la Fortaleza’, uno de los grandes recursos histórico-monumentales de Gran Canaria. Pudimos hablar con él de patrimonio histórico, de La Fortaleza, de nuevas formas de turismo cultural.

¿Por qué es tan singular el Yacimiento Arqueológico de La Fortaleza?

El Yacimiento de La Fortaleza tiene tres puntos fuertes que lo hacen diferente a cualquier otro yacimiento de la isla. Primero, se encuentra inserto en un paisaje singular como es la Caldera de las Tirajanas, con lo cual no sólo es Historia y Arqueología, sino también paisaje y naturaleza, fusionado todo en un enclave.

Segundo punto fuerte. Arqueológicamente estamos ante uno de los yacimientos más completos y ricos en manifestaciones de la isla: grabados rupestres, un gran poblado, cuevas funerarias, túmulos, cuevas con pintura, un granero excepcionalmente conservado, cuevas de habitación, marcadores arqueoastronómicos, escritura líbico-bereber, etc., el registro es impresionante.

Junto a esto, la investigación ha permitido crear un relato, una narración única para este enclave. Muchos yacimientos usan contenido genérico para ‘rellenar’ el vacío explicativo existente. Nosotros en cambio recurrimos a datos de La Fortaleza para explicar la misma. Tenemos un discurso y un relato bien hilado y argumentado.

 

¿Qué puede encontrar el turista o visitante local que se acerque al Centro de Interpretación de la Fortaleza? ¿Qué novedades presentan esta temporada?

Nuestra filosofía de gestión es intentar sorprender año a año. Y renovar los contenidos del centro. En principio, el visitante se suele sorprender de las propias instalaciones, de su modernidad, sobre todo por su existencia en un entorno rural.

En cuanto a las novedades, este mes en concreto es muy ilusionante para nosotros, porque a finales de noviembre inauguramos una nueva exposición: «Tocando el cielo. La Fortaleza como espacio sagrado» donde, gracias a la Fundación DISA, expondremos las últimas novedades con respecto al yacimiento y su vinculación a Amurga, una de las grandes montañas sagradas del Mundo Indígena Canario.

Buscamos sorprender, renovar contenidos año a año

 
 

 
 

Junto a ello, y también de la mano de la Fundación DISA, inauguramos un ambicioso proyecto educativo: ‘Tocando el cielo’. Este es un nuevo proyecto mediante el cual todos los centros podrán visitar el yacimiento de forma gratuita acompañados por un guía, además de poder disfrutar de recursos educativos muy variados que se han creado ex profeso.

 
 

 
 

Hay destinos donde la actividad turística conforma la base económica para recuperar el patrimonio. México o Perú serían ejemplos. Nosotros en Gran Canaria no estamos aún en ese nivel, pero se van dado pasos para unir turismo y patrimonio. ¿Pero cómo podríamos colaborar mejor?

No soy muy optimista al respecto, la verdad. En cualquier caso, yo aspiraría a que el patrimonio fuera una actividad complementaria y que pudiera incorporarse a la oferta ya existente. Creo que habría que hacer una reflexión sobre qué tipo de imagen turística queremos hacer llegar, y sobre cuál es el papel de nuestro pasado.

Desde mi perspectiva, tenemos un turismo donde el pasado isleño, y no sólo el arqueológico, apenas está presente. Faltarían quizás muchas más actividades de promoción real de los valores arqueológicos e históricos existentes, saliéndonos de los estereotipos e imágenes de archivo clásicas, y conocer como se está vendiendo dicho pasado.

En nuestro turismo el pasado apenas está presente

Cuando conoces de primera mano cómo trabajan, qué cuentan y de qué forma se presentan y visitan los yacimientos arqueológicos te das cuenta de que queda mucho por hacer. Hay un total cortocircuito entre las buenas intenciones para la difusión del Patrimonio Arqueológico y su ejecución real por aquellos que no tienen que ver con la propia Administración.

En principio, un buen comienzo sería crear un órgano gestor/coordinador del Patrimonio Cultural, (Histórico y Arqueológico) a caballo entre el Patronato de Turismo y la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico.

 

Tibicena está muy orientada al aprovechamiento de la tecnología en la gestión museística. ¿Nos podrías contar qué recursos concretos utilizan para enriquecer la visita al centro de La Fortaleza?

Sí, desde siempre hemos sido unos ‘freak‘ de la tecnología, porque creemos que nos ayuda a conseguir que las visitas resulten mucho más amenas y divertidas.

Un ejemplo concreto, nuestra mesa multitáctil, ‘la Tablé‘, un dispositivo donde 8 personas pueden llegar a interrelacionarse a partir de juegos y puzzles, facilitando que puedan conocer información adicional sobre el yacimiento. Todo de forma muy intuitiva y sencilla. También hemos realizado varios acercamientos a la realidad aumentada y a la realidad virtual.

 

¿Cómo afectará la tecnología a la narrativa de los museos en próximos años?

Si algo hemos aprendido es que ninguna máquina, ni ningún gadget podrá suplir a una buena guía realizada por un profesional con conocimientos y pasión con el tema explicado. Sin embargo, la tecnología sí genera cierta autonomía en el visitante, facilitando que pueda llegar a más contenidos y de una forma más amena que con el panel rígido y estático.

Toda esta tecnología, que cada vez se abarata más, conlleva dos cosas: por un lado dinero para llevarlas a cabo y por otro, dinero para su mantenimiento y renovación, por lo que sólo aquellos centros con unos recursos económicos mínimos pueden llegar a permitírselos.

Ningún gadget suple a un profesional con pasión y conocimientos

 


¿Las soluciones de realidad virtual para museos son muy caras?

Bueno, hoy en día ya hay soluciones low-cost para casi todo. El gran problema es el alcance, la simultaneidad.

Pongo un ejemplo. Nosotros hemos preparado la visita virtual con gafas 360 al yacimiento de La Fortaleza. Sólo hay que tener unas gafas 3D y un móvil de nivel medio alto. Es una inversión asumible. Pero si llega una guagua con 30 turistas, ¿cómo los atiendo? Es imposible. Debería tener al menos 15 o 20 gafas, con el coste que ello conlleva. Además de eso, necesitamos contar con un sitio donde se pueda ejecutar la aplicación con seguridad.

No obstante, sí pensamos que dándole una vuelta siempre se pueden encontrar formas de implementar de manera adecuada dichos recursos.

 


Hay un cierto enigma entorno a la cultura aborigen. Mantienen una aureola misteriosa, desconocemos muchísimas cosas de los primeros isleños. ¿La arqueología revelará todo lo que no se conoce de la sociedad aborigen?

¡Ojalá! Pero siempre nos quedaran cosas por saber. ¿Podremos saber qué pensaban? ¿En que creían? ¿Cómo veían el mundo y cómo se interpretaban? Creo que será muy difícil. Pero en ello estamos..

 

Última pregunta, más personal. ¿Qué te hizo interesarte por el tiempo pasado? ¿Por qué decidiste Marco que tu profesión sería la arqueología?

¡Pues ni idea! Sí te puedo decir que ya desde el colegio me interesó la Historia. Y la Prehistoria en concreto. Y ya una vez estudiando Historia te vas metiendo, metiendo, y vas asistiendo a seminarios, a cursos, a excavaciones, etc… Y cuando te das cuenta, pues ya estás trabajando de arqueólogo. Así que no fue realmente una decisión, sólo me deje llevar por lo que me gustaba…

 

 

 
 

*Visite la web del Centro de Interpretación y Museo Arqueológico La Fortaleza


*Reportaje gráfico: Bea Rivero